Un telecabina moderno y elegante que te lleva desde el Parque de Montjuïc hasta el Castillo de Montjuïc, con otra parada a la vuelta, en el Mirador.
Así que estás en Barcelona, esa brillante joya mediterránea donde las agujas góticas se encuentran con las curvas de Gaudí, y te encuentras al pie de una estación de teleférico preguntándote: ¿Cuál cojo: el teleférico de Montjuïc o el del Port Vell?
Vamos a desglosarlo. Ambos son paseos panorámicos por el cielo, pero ofrecen experiencias muy diferentes. Esta es tu guía sin tonterías ni pelusas para elegir entre ellas o hacer las dos, porque al fin y al cabo, estás en Barcelona, ¡y te mereces darte un capricho!
Teleférico de Montjuïc
Teleférico del Port Vell
Port Vell Cable Car
Abierto
1970 (reconstruida en 2007)
1931 (reestrenada 1963, 2000)
Longitud
752 m
1,303 m
Elevación
84 m de ascenso
~100 m de altura
Cabina
55 modernas góndolas de cristal con capacidad para 8 personas cada una
2 cabinas de época con capacidad para 20 personas cada una
Paradas
3: Aparcamiento - Mirador - Castillo
3: Miramar - Jaume I - Sant Sebastià
Accesible
✅
❌
Lo mejor para
Cómoda visita turística y al castillo
Dramático lanzamiento sobre el agua
El teleférico de Montjuïc te lleva por la colina desde el Parque de Montjuïc hasta el Castillo de Montjuïc, ofreciendo vistas de jardines, paisajes urbanos y monumentos históricos. El Teleférico del Port Vell cruza el puerto desde la Barceloneta hasta Montjuïc, ofreciéndote un emocionante paseo sobre el mar con espectaculares vistas de los barcos, la playa y el perfil de la ciudad.
Ambas ofrecen unas vistas fantásticas, pero de paisajes muy diferentes. El teleférico de Montjuïc destaca la ciudad, los parques y el castillo. El teleférico del Port Vell ofrece amplias panorámicas del puerto y del mar Mediterráneo.
Ambos teleféricos son seguros y aptos para familias. El Teleférico de Montjuïc puede ser más relajado, ya que recorre jardines y zonas verdes, mientras que el paseo sobre el agua del Teleférico del Port Vell puede resultar más emocionante para los niños a los que les gusten los barcos y el mar.
Actualmente, las entradas se venden por separado, pero puedes planificar tu visita para hacer las dos cosas el mismo día y disfrutar así de la mejor experiencia.