- El estilo "neomudéjar" de inspiración morisca es lo que hace que el arco destaque, especialmente los imperdibles ladrillos rojos que aparecen en el cielo azul de Barcelona.
- Construido en lo alto del Paseo de Lluis Companys, se utilizó como entrada a la Exposición Universal de Barcelona de 1888, lo que sin duda merece la atención de todos los que visiten Barcelona.
- Las bellas esculturas y tallas blancas lo convierten en un espectáculo digno de contemplar.
- El intrincado arte encierra una gran cantidad de valor simbólico para la estructura de Barcelona y descubrir el simbolismo es en sí mismo toda una nueva experiencia que merece la pena vivir.